![]() ![]() Estas son las voces que han pronunciado cada sílaba de esta historia. Por todo lo dicho, lo visto, lo oído y lo sentido. Que quizá sean el sonido extrañado en la boca de un adolescente en 2084, cuando las cenizas se nos hayan llevado, cuando toda la memoria haya ardido. El tiempo lo devorará todo y vendrá un día, cuando no estemos, en que la memoria de nuestra vida será solo el eco de nuestros nombres. Nadie sabe dónde empiezan las historias, lo que está claro es que todas se escriben con sus voces. De los que se quedaron y de los que desaparecieron. La historia de los que estuvieron y de los que se fueron. Obviamente, nada de lo escrito hasta aquí tendría sentido sin la pirámide alfabética de los que quedan aquí debajo.
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